“Es un sueño hecho realidad”
14 años, varias medallas y nueve récords mundiales sub20 más tarde, la estrella en ciernes del salto con pértiga es el último miembro de la familia PUMA de atletismo. “No quiero sonar a tópico, pero formar parte de la familia PUMA es un sueño hecho realidad”.” dijo sobre su nueva relación con PUMA. “Encaja a la perfección porque Usain Bolt es el más grande que ha existido, y no digo que yo sea él, pero seguir sus pasos es una oportunidad increíble”.”
En 2018, Mondo asombró al mundo del atletismo en los Campeonatos de Europa al establecer un Récord sub20 con un salto de 6,05 m. Muy motivado, inspirador y trabajador, Mondo tiene lo que hace falta para brillar en el camino hacia los Juegos Olímpicos de 2020. “Siempre tengo ese impulso de ser mejor que el día anterior. Es un deporte único. Sólo quieres mejorar, por ejemplo, yo lo he hecho, y siempre me estoy esforzando por conseguir ese próximo gran salto PB o salto ganador”.” Mondo explica su motivación.
Qué le fascina especialmente sobre el salto con pértiga es el hecho de que es una combinación de diferentes cosas: “Tienes el aspecto mental y físico de la prueba, además del técnico. Físicamente no soy el saltador más ‘fuerte’, pero tengo velocidad y técnica, y tengo la capacidad mental para compensarlo”.”
Su actitud, así como entrenar seis días a la semana, también ayuda. Aunque no siempre sea divertido. “Me gusta correr y saltar, pero cuando hago pesas y circuito, no disfruto demasiado del entrenamiento. Entreno porque me gustan los resultados que me aporta, y me esfuerzo para tener éxito en el futuro.”
Para Mondo seguro que tiene buena pinta cuando se trata de éxito futuro. Recién salido de la universidad, su carrera no ha hecho más que empezar. “Quiero ser campeona del mundo y, por supuesto, futura campeona olímpica. Quiero ser conocido como el mejor saltador con pértiga del mundo al final de mi carrera”.”
Armand “Mondo” Duplantis
La joven de 19 años nació en un familia atlética. Su padre, estadounidense, fue saltador de pértiga, y su madre, sueca, heptatleta y jugadora de voleibol. A los 7 años estableció su primera mejor marca mundial de la categoría de edad, y su salto de 3,86 m (12 pies y 8 pulgadas) a los 10 años superó también las marcas mundiales anteriores para las edades de 11 y 12 años.
En salto más significativo de su carrera hasta la fecha era el salto de 6,05 m de los Campeonatos Europeos de Berlín (Alemania). “Al día siguiente, fui al aeropuerto temprano por la mañana para coger un vuelo a las 7 de la mañana. Creo que esa noche dormí unos minutos. La ceremonia de entrega de medallas tuvo lugar sobre las 2:30 de la madrugada. Entré en el aeropuerto con mi bolsa de salto con pértiga con mi nombre y, literalmente, todo el mundo empezó a aplaudirme. Supongo que fue inesperado. Se me quedó grabado como un momento genial”.”